El nombre de este nuevo restaurante es toda una declaración de intenciones. Plática nace con la idea de recuperar la tradición de sentarse alrededor de la mesa y conversar tranquilamente mientras disfrutas de una cocina internacional creativa con toques nikkei.
Ubicado en pleno corazón del barrio de Salamanca, al frente de este proyecto están tres jóvenes emprendedores venezolanos, hijos de emigrantes gallegos, decididos a recuperar sus orígenes españoles a través de la herencia culinaria. El interiorismo de Plática, realizado por Kombu Design, también da mucho que hablar. Una elegante barra central invita al picoteo. La acogedora decoración en sus distintos espacios está inspirada en la fusión de sus cocinas, que se refleja en la paleta de color que transmite frescura, con un acertado contraste de texturas y materiales.
En Plática encontramos cocinas de diversos rincones del mundo. Su cosmopolita carta traspasa fronteras y se convierte en el punto de unión que fusionan sabores y productos de los tres continentes (Europa, Asia y América). Para empezar nos proponen marcarnos una entrada triunfal con platos ideales para compartir como su ceviche de corvina; croquetas de bacalao con mayonesa de aceitunas; coca menorquina con sardina ahumada; o su Tartar de atún rojo, que viene sobre unas tosta de maíz, guacamole y mahonesa chili. ¡Un gran comienzo!
Si hay algo que define a la cocina de Plática son sus platos elaborados al carbón. La estrella de la casa es, sin duda, el Cochinillo crujiente con manzana y granola. Da gusto escuchar el sonido que produce cortar un trozo de la piel crujiente y saborear después su jugosa y tierna carne. ¡Un platazo sobresaliente!
Muy sorprendente es también la Fideuá de sepia y langostinos. Un plato lleno de sabor, realizado con un fondo delicioso y muy trabajado, y en el que se aprecia en cada bocado la calidad de la materia prima.
En el apartado de los postres nos proponen "una dulce sonrisa para terminar". Chocolatísimo, Panna cotta lima limón, helados artesanales y una Tarta dos quesos y helado de yogur y frutos rojos. Está elaborada con queso crema y un toque de La Peral, un queso azul asturiano parecido al roquefort francés, Damos fe de que está ¡riquísima!. (Descubre las mejores tartas de queso de restaurantes en Madrid)
Pero la verdadera joya de la corona es su Cookie de chocolate al carbón con helado de vainilla. Os aseguramos que después de llevaros la primera cucharada a la boca ya no podréis parar. ¡Deliciosamente irresistible!
En definitiva, que estamos enamorados de la variedad de bocados y sabores delicados procedentes de distintas culturas que puedes encontrar en Plática. Un elegante restaurante en el que no solo se come bien y, a buen precio, sino que además su servicio es inmejorable. Razones más que sobradas para hacerles una visita y, por supuesto, disfrutar de una animada charla con quien tu prefieras. Por cierto, en su carta ofrecen una selección de platos para celiacos, como por ejemplo, el meifun mar y montaña, y opciones para los vegetarianos como el chaufa vegetal, un arroz con coliflor y verduras salteadas.
Plática Calle Recoletos 13 Tlfno: 660 25 81 84 Precio medio: 35€. Horario: lun.: 8:30–16:30 mar.-vie: 8:30–24:00 sáb.: 13:00–17:00, 21:00–24:00 https://platica-restaurante.negocio.site/
Me gusta mucho todo, pero ese cochinillo y los postres, lo que más.
Buena recomendación.
https://micocinayotrascosas.com/
Alucino con la cocina mexicana, es una de mis preferidas a nivel internacional, junto con la japonesa.Muchas gracias, un abrazo. Celeste
Me ha encantado la decoración, es imponente y esa pata de cochinillo asado tiene un pinta brutal. Guardo la referencia para conocelo más adelante
Que espacio tan acogedor y la gastronomía mexicana es una de las que más me gustan, esa cookie en sarten me vuelve loca, precisamente yo hice una vez una gigante y la tengo publicada en el blog.
Un abrazo
Sofía
www.milideasmilproyectos.com
¡¡alucinante! me recuerda las barras de los años "70", ¡¡que bonito!!! y la comida es espectacular, a mi me apasiona la cocina nikkei.
¡no me lo puedo perder!!!
un abrazo
Concha Bernad