A pocos kilómetros de Madrid, en Pozuelo de Alarcón, se encuentra uno de nuestros últimos descubrimientos gastronómicos. Con solo unos pocos meses de vida, Mariuca es uno de esos restaurantes que apuesta por la cocina tradicional sin artificios y el producto de calidad gracias a la experiencia hostelera de su propietario, el empresario Luis Moreno, en su hermana mayor Casilda, ubicada en Valdemoro. Unas señas de identidad que, junto con el cariño y el trato que brindan en sala, lo convierten en un lugar al que acudir cuando se quiere disfrutar de los sabores de siempre y la buena mesa. El local está diseñado para disfrutar tanto del picoteo como de una comida más sosegada. En una primera zona, su barra y sus mesas altas ofrecen una carta específica de raciones. Mientras, en la sala, encontramos un espacio sobrio y elegante en el que reinan sus sillas de colores y unas amplias mesas vestidas con manteles de hilo. También es posible disfrutar de sus platos al aire libre en la terraza que han instalado en la calle peatonal.
En la propuesta gastronómica de Mariuca destacan platos tan conocidos como las croquetas, la ensaladilla y embutidos como la cecina de León y estupendos Ibéricos que sirven junto con un queso que conquista al comensal al primer bocado.
En esa línea de apostar por la materia prima de calidad no pueden faltar los productos de lonja que traen de Sanlúcar de Barrameda como esta Gamba roja, que estaba cocinada en su punto justo y nos recordó a la que tomamos hace unas semanas en el restaurante La Fuencisla.
Productos de primera como sus Almejas con ajos confitados, de esas para comer con las manos, chuparse los dedos y terminan haciendo barquitos con el pan para comernos la salsa. ¡Mmmm!
Entre las elaboraciones que más nos conquistaron y os recomendamos destaca su Atún rojo estilo Mariuca. Un atún apenas sellado a la plancha que se sirve templado sobre una salsa de tomate frito casero. Todos los que compartimos mesa estuvimos de acuerdo en que se trataba de un plato para repetir.
Otra de las sorpresas que nos encontramos fueron sus Chipirones a lo Pelayo, salteados a la plancha con crujiente de cebolla. Os contamos la historia de esta receta: se dice que sobre 1900 el dueño de un bar de Guetaria llamado Pelayo harto de comer el chipirón en su tinta decidió cocinarlos de otra manera y hoy en día esta sencilla propuesta se ha convertido en una de las más populares de la gastronomía vasca. Una curiosa historia de un plato que merece la pena probar.
Entre la gran variedad de segundos que incluye la carta de Mariuca, decidimos que eramos un grupo para compartir varios. Del mar nos decantamos por su Lubina salvaje a la plancha, un pescado que sirven con unos ajitos y verduras como colifor, calabacín y patatas.
De la tierra elegimos su Steak Tartar. Un plato que pedimos siempre que nos aseguran que lo preparan en la mesa y al gusto del cliente, que en nuestro caso es subido de picante. ¡Da gusto ver como van mezclando los distintos ingredientes!
En Mariuca lo sirven sin mezclar con la yema de huevo porque, afirman, el resultado es mejor. Nosotros lo calificamos de sobresaliente por su sabor y por su elaboración. Merece la pena destacar los sitios en los que lo preparan a la vista del comensal como hacen en el restaurante Tejas Verdes, en San Sebastián de los Reyes y en Normandie Ondarreta, en El Molar.
Tampoco nos pudimos resistir a su Rabo de toro a la cordobesa, uno de los imprescindibles de este local que cuenta con raíces andaluzas y no se olvida de las recetas y sabores de su lugar de origen.
A estas alturas, aunque parezca casi imposible, todavía había hueco para un variado de postres para compartir. Un Brownie junto con unas Tartas de queso, de manzana y de zanahoria que pusieron el broche de oro perfecto a una más que agradable comida. (Descubre las mejores Tartas de queso de Madrid).
En definitiva, que nos ha gustado mucho la propuesta gastronómica de Mariuca. Un restaurante y una carta con recetas en la que la materia prima y los guisos de siempre son los protagonistas. Propuestas que conquistan a los más clásicos y que son ideales para compartir en familia con alguna de las más de 50 referencias de vino de las que disponen. Solo nos queda decir... ¡Nos vemos en Mariuca!
Mariuca Calle París, 10 (Pozuelo de Alarcón) Tlfno: 912 552 614 Precio medio barra/restaurante: 20/40 €
Vaya productazo tiene este restaurante, y vaya compañía en la comida :)
Tiene todo una pinta deliciosa, qué ganas de poder volver a ir a los restaurantes. Lo apunto en mi lista de pendientes.
Un abrazo,
Iris Fogones
Es uno de los restaurantes que tengo arriba de la lista, para volver cuando todo esto pase. Me encantan los platos que tiene y ese tipo de restaurante clásico
https://gastroactivity.com/
Buen sitio, buena comida, se ve todo muy apetecible.
Deseando poder ir.
Qué ganas de poder disfrutar otra vez de estos sitios. Esas gambas rojas me están llamando a gritos.