Hong Kong 70 es un pedacito de la China más auténtica en Madrid. Este restaurante, que acaba de abrir sus puertas en el centro de Madrid, ofrece una gastronomía cantonesa, originaria de la provincia de Guangdong, al sur del país. Comida preparada con ingredientes del cielo, la tierra y el agua en la que lo principal es la frescura de sus platos, cocinados en su mayoría al vapor para que no pierdan su esencia.
Ubicado junto a la Plaza Mayor, en el número 28 de la calle Toledo, la decoración del local nos traslada al Hong Kong de los años 70, de ahí el nombre del restaurante. El espacio se divide en dos plantas y tiene constantes recuerdos a la cultura oriental como los taburetes o los tableros hechos con piezas del dominó, ejemplares de periódicos locales colgando de la paredes o réplicas de patos colgando de la cocina vista de un restaurante que, por cierto, es de los mismos dueños que Ninja Ramen (leer POST)
En su amplia carta hay propuestas variadas elaboradas por chefs originarios de Hong Kong. Para empezar nada mejor que elegir alguno de sus Dim Sum caseros cuyo significado en cantonés es "tocar el corazón". Ofrecen hasta diez pequeños bocados y nosotros comimos los Siu Mai de cangrejo con gambas y huevas de pez volador. ¡Un gran comienzo!
Las verduras frescas juegan un papel fundamental en Hong Kong 70. Brécol y repollo chino que traen todos los días desde Fuenlabrada y que son un perfecto acompañante para el plato fuerte de la casa, sus asados. Nosotros probamos el Da Pin Pan, un plato con cuatro tipos de asados variados: pato, costillas y cerdo a la miel y panceta, que nos recordó a nuestros típicos torreznos. Un plato sobresaliente e ideal para compartir.
A continuación llegó el turno de comer el Nido de tallarines crujientes con pollo y setas. Un plato en el que debes mezclar bien todo los ingredientes para que así los fideos se empapen bien.
Terminamos la parte salada con unas Vieiras en su concha con salsa XO de la que creemos que con solo ver la foto sobran las palabras.
Y aunque en China no es muy habitual tomar un postre, nosotros decidimos pedir un Cheesecake de té verde que nos había llamado la atención. ¡Un sabor diferente!
En definitiva, que celebramos la apertura de un restaurante con comida cantonesa genuina en pleno centro de Madrid en la que destacan los sabores naturales y los aromas suaves. El local es bonito, la comida está bien presentada y muy buena, el trato es correcto y el precio asequible. ¿Se puede pedir más?
Calle de Toledo, 28
Teléf: 910 59 83 78
Precio medio: 20€
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