Al estilo paulista, entre napolitanas y romanas, y con ingredientes de calidad
Tienen gran tamaño, las puedes personalizar y pedir cada mitad de un gusto
Son gigantes, están bien cargadas de ingredientes y su masa es tan deliciosa, que no dejarás ni los bordes. Así son las pizzas que triunfan en Sao Paulo y que ahora puedes comer en Madrid en San Paolo Pizza Bar. Detrás de esta nueva pizzería, ubicada en la calle Juan Ramón Jiménez, 37, está la familia Iglesias, propietaria de Rubaiyat, y Deco Lima, creador de las pizzerías Bráz, las más famosas de Brasil.
¿Y cómo son las pizzas brasileñas? Uno de sus secretos es la masa, que mezcla el airoso estilo de masa napolitano con el crujiente toque romano, ya que se tuestan durante más tiempo (algo más de tres minutos a 340-380 grados en un horno eléctrico que se ha traído directamente de Nápoles. Las bases, de harina Caputo y ecológica de molienda lenta a la piedra se coronan con ingredientes seleccionados de pequeños agricultores y con Denominación de Origen, empezando por los clásicos tomates San Marzano, la mozzarella artesanal, la albahaca fresca... ¡Una delicia vamos!
En la carta encontramos una quincena de pizzas, entre rojas y blancas. Sabrosas, copiosas y llamativas, al estilo de Brasil, algunas de las más originales son la de bimi con txistorra, la Matrimonio, muy castiza, con anchoas, boquerones y piparras, la de paleta ibérica 100% bellota, la 4 quesos españoles, la de ensalada de ventresca, la de mortadela con burrata y crujiente de pistacho...
En San Paolo Pizza Bar, también hay propuestas más tradicionales con algún toque original como la Marguerita, a la que se le añaden rodajas de tomate fresco; o la Amatriciana, con mozzarella, tomate semiseco, cebolla morada, guanciale y pecorino...
¿Lo mejor de estas pizzas? Están pensadas para compartir y se pueden customizar completamente, pidiendo cada mitad de un gusto. Además, son adaptables a vegetarianos y veganos.
Una pequeña selección de “antipasti” y ensaladas, entre las que destaca la de rosbif de Rubaiyat, o la tabla de embutidos italianos puede ser un buen comienzo. Eso sí, recuerda que las pizzas que pidas son muy grandes.
¿Y para acabar? Es difícil que te hayas quedado con hambre, pero si eres tan goloso como nosotros te recomendamos probar alguno de sus postres. Su cremoso tiramisú, el tradicional “cannoli”, su brownie con helado o el pudin de leche (el flan brasileño de toda la vida).
San Paolo Pizza Bar
Calle Juan Ramón Jiménez, 37. Madrid
Precio medio: 25 euros
Horarios: Cenas de M-X de 20-23.30h.
Página web aquí