El reconocido chef realiza propuestas sorprendentes como su Sherry Mary con erizo
Popa ofrece varios menús gastronómicos, pero mantiene sus tapas y raciones
El restaurante Popa renueva su carta y su oferta gastronómica con la incorporación del reconocido chef Willy Moya. Una propuesta con la que quieren convertirse en uno de los restaurantes de referencia de la zona norte de Madrid en el que disfrutar de una buena mesa, un servicio de calidad y un ambiente agradable.
En su nueva carta, que se puede disfrutar en forma de menús, no abandonan sus tapas y raciones para disfrutar de un momento informal acompañado de una caña o un vermut. Pero nosotros, en esta ocasión hemos visitado Popa para descubrir el universo de su reconocido cocinero, que se pone al mando de los fogones de un restaurante que conocimos hace dos años cuando Alfonso Perales era su chef.
El restaurante Popa presenta sus platos en un espacio muy amplio y lleno de luz gracias a sus grandes ventanales. Su decoración, moderna, de líneas sencillas y colores neutros permite centrar la atención en la comida. ¿Te apetece conocer Popa de nuestra mano?
Un plus del restaurante Popa es su terraza interior, muy coqueta e ideal para una cita romántica o para ir con amigos
Empezamos nuestra experiencia con un Paté ibérico al oloroso con escabeche con naranja amarga. Una propuesta divertida porque el paté que estaba escondido en un trampantojo de esta fruta.
Seguimos con el juego gastronómico con la Viera Kimchi. Un marisco que se presenta sobre media lima para comer frotando los dientes sobre ella y que aporte su toque cítrico a la vieira.
Sobre una alga nori se sirve el Taco oriental de steak tartar y huevo de codorniz. Otra elaboración en la que se juega con mezclas que no son las habituales, y con el contraste de sabores y texturas. Un platazo sobresaliente que también le encanta a nuestra amiga Vanessa de magazinespain.com
Entre las creaciones de Willy Molla tenemos que destacar su Sherry Mary con erizo y tortillita de camarones. Este plato, que se disfruta en dos pasos, es toda una sorpresa. Primero, se comienza bebiendo el cocktail a base de fino en el que se puede apreciar la intensidad del erizo. Después, llega el momento del bocado crujiente con la tortillita de camarones. Tenemos que destacar la innovación y elegancia de este plato que nos conquistó en el primer sorbo y al primer bocado. ¡Para repetir una y otra vez!
Llegado el turno de los segundos, tomamos el Pargo a la llama con puré shiitake. Un pescado en su punto justo de elaboración con un toque de brasa y el contrapunto de las setas que hace las delicias de los comensales más marineros.
Cerramos la parte salada del menú con una Carrillada ibérica al oloroso con remolacha. Una carne tierna y jugosa ideal para terminar.
La parte dulce fue el broche final de la cena. El Sorbete de piña asada con panacota de coco es una propuesta muy caribeña en la que no falta el ron. Nos encanta porque nos traslada a la playa en cada bocado en este año en el que no hemos podido viajar todo lo que hubiéramos deseado. Un postre refrescante y, sobre todo, diferente ante la invasión de las tartas de queso en la mayoría de los restaurantes madrileños (Descubre las mejores tartas de queso de Madrid).
Como conclusión solo podemos decir una cosa: tenéis que ir a Popa por tres razones: su cocina, su ambiente y su atención. Su personal de sala es muy atento, el restaurante es bonito y luminoso, pero sobre todo nos han enamorado sus propuestas culinarias. Platos sabrosos y originales en los que se mima el producto y la presentación, para compartir en pareja, con amigos o con la familia. Todo un planazo para llenar de buen sabor de boca este extraño 2020.
Popa
C/Santa María Magdalena, 14
Telf.: 91 345 98 31
Precio menú: desde 30-35€
Página web aquí