A solo unos pasos del Paseo de la Castellana y del estadio Santiago Bernabéu, encontramos Lúbora. Un restaurante de cocina de autor mediterránea que incorpora toques de fusión a sus elaboraciones. Un espacio en el que disfrutar de una gastronomía diferente y sorprendente porque aquí no hay carta, solo tres menús degustación sorpresa y un cuarto con sus platos más emblemáticos. Una apuesta arriesgada con la que conquistan paladares.
En la decoración, se aprecia un ambiente cuidado y un estilo sencillo, en el que destacan los detalles y fotografías caninas. Elementos que rinden homenaje a las dos perras del propietario, Lua y Bora, y cuyos nombres tomó Raúl Harillo para bautizar el local.
Los menús se diferencian en función de su longitud: corto (seis pasos), medio(ocho pasos) y largo(diez pasos). Nosotros, aconsejados por su personal de sala, optamos por el intermedio por aquello de que en el punto medio se encuentra la virtud. En nuestro caso, además, nos permitieron hacer dos menús diferentes para poder probar más propuestas.
Antes de servir el menú, nos trajeron un Caldito de pescado con brandy, una selección de ibéricos y una ensaladilla que sirven con aceite de oliva Guadalimar. Tras los cuales trajeron los dos primeros platos: una Salmorejo cordobés con espuma de albahaca, que sirven con nieve de queso de cabra y aceituna rallada; y una Crema de zanahoria con migas crujientes, con un toque de chistorra y pimienta de Jamaica. Una sopa fría y otra caliente muy interesantes para comenzar.
Seguimos con un Desierto de Foie micuit desmigado y congelado con geles de sabores de albahaca, fruta de la pasión, px y frutas del bosque; y una Coca crujiente de paté de perdiz y membrillo casero con fresas. Mmmm!
Nos declaramos auténticos fans de los platos de cuchara, por eso nos encanta probar las propuestas de caliente de los restaurantes que visitamos. Aquí tuvimos la oportunidad de degustar su Guiso de garbanzos con langostinos al ajillo y un Cous cous israelí con ternera al curry, pistachos y mermelada de ciruela. Dos propuestas muy diferentes para conquistar a los amantes de los sabores intensos.
Más ligeros y refrescantes, pero también de sabor intenso son su Tartar de atún con ali oli, trufa y huevas de tobico; y su Ensalada de sardinas ahumadas con crema de queso mascarpone y albahaca, tomate seco y pipas. Dos elaboraciones aparentemente sencillas, pero que nos encantaron por la combinación de ingredientes que les daba un toque diferente.
Ya en los segundos platos y comenzando por los pescados probamos unas Cocotxas de bacalao con un pil pil de rúcula y spaguetis de mar; y una Corvina al horno sobre crema de apionabo, bilbaína de piquillo y kale frito. Dos elaboraciones diferentes, pero con una filosofía común: respetar la materia prima para que mantenga todo su sabor.
En Lúbora también se atreven con propuestas tan atrevidas como la fusión asiático-española de su Siu-mai relleno de secreto ibérico con salsa de carne...
... o mezclas hispano-brasileñas como su Picaña de vaca madurada con chimichurri y kikos. Mezclas sorprendentes y divertidas.
Uno de sus platos más reconocidos son sus Callos con mucho morro, Un guiso que ha sido premiado y que mantienen en sus menús por el éxito que siempre cosecha entre sus comensales. Una vez probado entendemos perfectamente porqué han sido galardonados y estamos seguros que volveremos a por más.
Como al 50% de Madrid me enamora no le entusiasma la casquería, nos propusieron probar también el Jarrete de ternera con crema de guisantes, boniato y edamame. ¡Nos conquistó!
Su postre más emblemático es su Leche con galletas, pero también quisimos probar algún otro dulce y nos decantamos por su Tarta de manzana. Dos delicias que hacen que nos ratifiquemos en eso de que 'siempre hay que dejar hueco para el postre'.
Nuestra visita a Lúbora no pudo terminar con mejor sabor de boca, y es que este es un restaurante para disfrutar de la alta cocina a un módico precio. Un local en el que poder probar platos elaborados al estilo de los estrellas Michelin de manera informal y aun precio comedido. en definitiva, que recomendamos ir a Lúbora para adentrarse en el universo de elaboraciones sorprendentes y mezclas divertidas.
Lúbora
Calle Edgar Neville 39
Telf.: 911 26 16 50
Precio menú degustación: A partir de 35€.
www.lubora.com